Capítulo 16: Un año después

No sabía si eran sensaciones suyas, pero creía que Malena (o mejor dicho, Coco), le estaba ocultando algo, ese sobre tan raro, esos gestos de nerviosismo y por sobre todo el nombre Pía escrito con letras desiguales y en color azul brillante, con estrellitas de diferentes formas y tonos amarillos, era lo que más le molestaba del asunto. No había que ser un genio para saber que esa tal Pía tenía algún tipo de vínculo con Malena, y Lucas iba a sacárselo como fuera, tal vez tendría que investigar por su cuenta pero primero intentaría ir "por las buenas", Malena tenía que contárselo sí o sí. Aunque tampoco entendía por qué le molestaba tanto que aquella extraña y misteriosa chica que acababa de conocer, le ocultara cosas. Pensó que simplemente tenía que ser curiosidad, pues él es una persona extremadamente curiosa y despierta, pues tantos años en la calle no fueron en vano, ya que aprendió muchas cosas que los niños de su edad ni se imaginarían. Sabía que Malena era diferente en muchos aspectos, pero sólo tenía curiosidad. Sí sólo tenía que ser eso, ¿o podría ser...?
No. Definitivamente Lucas estaba obsesionado con los misterios y Pía era uno de ellos. 


Por otra parte, Soledad había comenzado a trabajar en el hogar con una peluca y unas gafas. Álvaro no la había reconocido —algo tonto por su parte, pero había que reconocer que Álvaro muy avispado no era— y ya llevaba un un año trabajando para ellos. Era muy reservada con sus cosas, nadie podía entrar a su cuarto sin permiso, pero siempre los animaba cuando estaban tristes, los ponía a bailar cuando estaban aburridos, los ayudaba a hacer los deberes y les aconsejaba numerosos temas. Claro que, no conocían mucho de ella, era extraño, se abría a ellos, les cantaba, bailaba, hablaba con ellos y era muy simpática, pero a la vez parecía que no se abría, que no quería contarles nada sobre ella. La semana pasada, Mateo le había preguntado que de dónde venía y le había contestado que de un país muy lejano, mientras se daba la vuelta para volver a limpiar el polvo de un recobeco que acababa de repasar. Todo era muy extraño en aquella mansión, parecía que en vez de felicidad, en esa casa lo que más abundaban eran los secretos.
Tali se estaba mostrando muy rara con Julián y Carola: desde que habían anunciado que estaban saliendo, estaba muy distante. Se había hecho amiga de una chica llamada Nadia que había conocido en la calle. La chica era rubia y tenía los ojos marrón avellana, vestía siempre de sport y era bastante amable. Era también huérfana, pero era muy mayor como para estar en Rincón de Luz, así que se había quedado de forma permanente, ayudando a Soledad en las tareas matutinas de la casa, lo hacía bastante bien. Junto a ella, había conocido a Rocky, con el que estaba a todas horas (menos para comer, cenar y dormir), Carola era consciente de que Tali llevaba más de una semana sin ir al colegio, siempre se iba con Rocky y su pandilla antes de que la campana sonara. Ayer había ido para llevar una nota de que había estado enferma con fiebre y dolor de garganta, con la firma falsificada de Álvaro, hecha por Pansy, una amiga de Rocky y ahora también de Tali. Pansy era todo una profesional en falsificar firmas, ella no era huérfana, pero sus padres estaban de viaje casi todo el tiempo, podía hacer todo lo que ella quisiera. Con Carola estaba muy fría y cortante y con Julián... bueno, basta decir que se sonroja cada vez que se cruzan aunque sea sólo una mísera mirada. Se podía decir que estaba cambiando, pero para peor, antes por lo menos hablaba, ahora se mostraba distante y reservada, su mirada era gélida y sin expresión alguna, como si algún dementor hubiera salido de Azkaban y de los libros de Harry Potter para venir a besarla; a apoderarse de su tristeza, miedos y preocupaciones, que la hubiera arrancado la alegría y las ganas de vivir la vida, para unicamente centrarse en lo malo, en lo negativo. Al contario de Carola, que estaba más viva que nunca, Julián parecía haber visto la luz, ya no era tan negativo, sus ojos marrones centelleaban como nunca, gracias a Carola. 
Malena estaba más preocupada por recibir una carta de Pía que por sacar un diez en las asignaturas. Y Álvaro... ¿qué decir de Álvaro?, estaba más idiota que nunca, ahora tenía otra novia llamada Juliètte, que era francesa. La chica era rubia, de ojos azules, alta y con una figura esbelta y profundamente pesada e irritante, una verdadera pesadilla. Álvaro salía de fiesta cada vez que se le presentaba la oportunidad, es decir: siempre, y dejaba de encargado a Tobías —siempre que pasaba esto, el pobre Tobías parecía convulsionar—  y a Soledad, que estaba muy contenta con ese hecho (pero siempre preocupada por Tali y sus salidas longevas). Parecía que todo iba bien en Rincón de Luz, pero no, había muchas cosas que separaban a los protagonistas de esta historia, como por ejemplo: los secretos. Esa casa estaba repletos de ellos, y no sólo la casa, sino también sus habitantes, y no sólo sus habitantes, Soledad tenía su más grande secreto entre las cuatro paredes de su diminuta habitación: la foto de su hija perdida, se la arrebataron de las manos antes de ni siquiera poder cogerla en brazos. Su hija estaba en esa casa, su hija estaba en Rincón de Luz. Esperaba que nunca nadie se enterara de su mayor secreto, pero el problema era, que había alguien que sí lo sabía, se había enterado por casualidad, Carola deseaba desvanecerse de aquel momento, del momento en el que descubrió que Tali, su mejor amiga, era la hija perdida de Soledad.



N/A: Holaaa, realmente no había pensado continuar con este blog, porque no me interesaba, no tenía inspiración para continuar esta historia, pero he decidido que la voy a terminar, mañana terminaré la historia con el último capítulo. Bueno, la verdad es que ha pasado mucho tiempo desde la publicación de esta historia (el otro blog que tenía también sobre RDL lo empecé en 2013, pero inesperadamente se eliminó), y la verdad es que ya no estaba interesada en Rincón de Luz, pero el otro día oí una canción y me insipiré a escribir este pequeño capítulo. No me gusta para nada como están escritos los otros capítulos, es más lo empezaría de nuevo, pero no tengo demasiado tiempo así que creo que así está bien. Ahora tengo otros gustos, por ejemplo estoy muy obsesionada con Harry Potter y tengo otro blog en donde me he inventado una historia a partir del mundo mágico de J.K Rowling. El personaje principal se llama Bonnie y está muy centrado en los secretos de Hogwarts y lo que vienen a ser los hijos de los personajes de Harry Potter. Si os interesa, este es el link: Bonnie Hataway.
Nada más que añadir, sólo GRACIAS y ¡¡FELIZ NAVIDAD a todos!!